Fuerteventura, la joya del archipiélago canario, ha forjado una historia cautivadora a lo largo de los años. Esta isla, con su paisaje espectacular, sus interminables playas de arena dorada, dunas imponentes y aguas cristalinas, ha evolucionado desde un remoto rincón hasta convertirse en un destino turístico de renombre
La historia del Barco Majorero es realmente interesante y está relacionada con el turismo de Fuerteventura.
Este barco ha sido testigo de cómo la isla ha cambiado y se ha vuelto cada vez más popular entre los turistas a lo largo del tiempo.
Ahora, vamos a explorar con más detalle esta historia y entender cómo ha sido parte fundamental de la evolución de Fuerteventura como punto de interés vacacional.
Diseño y construcción del Barco Majorero
En la primavera de 1989, en un distinguido astillero de Palma de Mallorca, comenzó la creación de una innovadora golondrina de madera con un fondo de cristal. Esta magnífica embarcación, con una longitud de 19,95 metros, estaba propulsada por un motor y tenía la capacidad de albergar a 150 pasajeros. Cada aspecto de su diseño se concibió meticulosamente para proporcionar experiencias inolvidables en el transporte turístico. Tras su construcción, esta joya de la navegación fue bautizada con el nombre de «Majorero».
El Barco Majorero se distingue por su diseño de madera y su fondo de cristal. Mientras navega, los pasajeros pueden ver directamente el mar debajo de ellos, disfrutando de la vista de los peces y el fondo marino. Esta característica hace que cada viaje sea una oportunidad para aprender y disfrutar de la naturaleza
El viaje inaugural y la llegada a Corralejo
El Majorero, uno de los barcos de mayor envergadura que jamás hubiera atracado en el muelle de Corralejo, partió de las Baleares en la madrugada del 6 de agosto de 1990. Tras una breve parada en Algeciras para recobrar fuerzas, emprendió su travesía directa hacia las cálidas costas canarias. Durante cinco días y cuatro noches, surcó los mares hasta que, finalmente, en la mañana del 11 de agosto de 1990, el Barco Majorero llegó a Corralejo. Esto, marcó el inicio de su servicio como un componente esencial del transporte turístico en la región.
Concesión y ruta regular
Un acontecimiento de gran relevancia se produjo el 21 de junio de 1991, cuando Nortour recibió una valiosa concesión por parte de la Dirección General de la Marina Mercante. Esta concesión les permitía operar la línea regular entre Corralejo e Isla de Lobos. Desde ese día, el compromiso de la empresa ha sido inquebrantable, conectando de manera diaria el municipio de La Oliva con la isla de Lobos, un espacio natural que es un verdadero tesoro de Fuerteventura.
Más de 30 años de servicio
Durante más de tres décadas, el Barco Majorero ha ofrecido salidas diarias desde el puerto de Corralejo, convirtiéndose en una constante en la vida de la isla. A lo largo de este tiempo, ha mantenido los más altos estándares de seguridad y comodidad, priorizando siempre la satisfacción y bienestar de sus pasajeros.
Impacto cultural
El Barco Majorero ha trascendido su papel como un simple medio de transporte y se ha convertido en un símbolo de riqueza cultural y económica en la región. Ha permitido a los visitantes explorar la belleza natural de Fuerteventura, promoviendo la conciencia ambiental y el enriquecimiento cultural.
16 de septiembre de 2023
Sin embargo, en la historia del Barco Majorero también se encuentra un capítulo menos agradable.
El 16 de septiembre de 2023, mientras realizaba un paseo por la costa del Islote de Lobos , el barco rozó con las rocas del fondo marino.
En ese momento, la embarcación transportaba a 47 pasajeros. Gracias a la pronta respuesta de la tripulación y la colaboración de otras embarcaciones en la zona, todos los ocupantes fueron evacuados con seguridad y sin sufrir daños significativos.
Este incidente subrayó la importancia de la preparación y la respuesta efectiva ante situaciones inesperadas en la industria turística. La empresa demostró su profesionalismo y dedicación al garantizar la seguridad de todos los involucrados.
Se llevaron a cabo reparaciones bajo la supervisión de las autoridades pertinentes y se gestionó eficientemente la extracción del combustible para prevenir impactos ambientales.
La colaboración y el apoyo de nuestra gente del pueblo, las empresas y las organizaciones durante este desafortunado episodio resultaron vitales. Su contribución y trabajo en equipo fueron esenciales para asegurar que los acontecimientos se desarrollaran de manera segura y sin complicaciones.
En momentos de adversidad, la solidaridad y la colaboración de la comunidad demostraron ser algo reconfortante y fundamental. La empresa agradece sinceramente la comprensión y el apoyo recibidos por parte de todos y se compromete a seguir brindando un servicio seguro y confiable en el futuro.